NUEVO LIMITADOR DE VELOCIDAD OBLIGATORIO
El pasado mes de julio entró en vigor ISA (Intelligent Speed Assistance o Asistente Inteligente de la Velocidad), cuyo objetivo es limitar de forma automática la velocidad de los coches
Este Asistente Inteligente de Velocidad está instalado en todos los coches, es decir, tanto en vehículos comerciales como en coches pesados y turismos, desde el 6 de julio de 2022. Esto quiere decir que el ISA estará presente en los nuevos coches que se comercializan a partir de esta fecha. A continuación te explicamos en qué consiste y cómo afectará este nuevo asistente a la conducción.
Qué coches estarán equipados con el ISA
Los vehículos que están cerca de salir al mercado en Europa, como el Ford Ranger o el Renault Austral, deberían contar con el Asistente Inteligente de Velocidad. En cambio, si se adquiere un coche nuevo que ya estaba en venta desde antes del 6 de julio, como un Ford Kuga St-Line o un Seat Arona 1.0, éste no vendrá equipado con el sistema.
Asistente Inteligente de Velocidad: una nueva era de prevención al volante
Debemos tener presente que el ISA está considerado como una de las innovaciones más importantes del momento, especialmente en materia de seguridad. De hecho, no se ha visto nada parecido en las últimas décadas. Según los cálculos, este asistente de velocidad puede ayudar a reducir hasta un 30% los accidentes de tráfico; incluso se podrían evitar hasta un 20% de fallecimientos por exceso de velocidad.
Esto representaría un cambio considerable en términos de seguridad vial, pues solamente en España los accidentes por exceso de velocidad constituyen un 23% de los accidentes mortales. Estas cifras registradas por la DGT indican que, en 2019, aproximadamente unas 300 personas fallecieron por esta causa.
¿Cómo funciona ISA? ¿Realmente puede limitar la velocidad de mi coche?
El Asistente Inteligente de Velocidad puede limitar la velocidad gracias a un sistema llamado Virtual Horizon, desarrollado por la compañía holandesa conocida como TomTom. La idea es que el coche esté equipado con una cámara capaz de leer las señales de tráfico. Del mismo modo, el dispositivo puede extraer la posición del vehículo mediante el GPS, lo que permite conocer la velocidad máxima permitida en esa localización específica.
Gracias a esto, el sistema puede evitar confusiones al momento de leer las señales de tráfico: no será posible que el dispositivo confunda, por ejemplo, la señal de 60 km/h con la señal de limitación de velocidad de la autovía. Por otro lado, si el coche se encuentra por carreteras donde la velocidad es variable, el dispositivo se guiará por la señal luminosa, que en este caso es más importante.
Una vez que el sistema haya registrado la velocidad máxima permitida, el dispositivo procede a compararla con la velocidad del vehículo. En caso de que el coche supere el límite, el sistema se encargará de avisar sobre el exceso de forma automática. Asimismo, le notificará al conductor, mediante una alerta sonora y visual, que está excediendo los límites. ¿Y si no hago caso del aviso?
En caso de que el conductor no desista, el ISA actuará por sus propios medios:
- Primero, el acelerador empezará a vibrar
- Después el pedal se volverá mucho más duro, haciendo que cada vez sea más difícil de pisar.
La idea no es solo evitar que el coche exceda el límite de velocidad, sino también hacer que el conductor tome consciencia sobre ello. Otro aspecto importante es que con el ISA podemos evitar de manera sencilla las multas de tráfico, pues apenas el sistema detecte una anomalía, le notificará al conductor.