El contrato a través del cual se puede acceder a un vehículo nuevo o usado por un alquiler a largo plazo es el renting de coches.
En este tipo de operaciones, la empresa dueña del automóvil se hace cargo de los costes financieros, el pago de impuestos, el seguro y el mantenimiento.
Un estudio publicado por la Asociación Española de Renting en febrero de 2021, estableció que este negocio incrementó en un 66% desde 2015. Según el informe, en los últimos 5 años fueron añadidas 295.765 unidades, gracias a la incorporación de una mayor diversidad de clientes a este mercado.